Último trimestre del año, ¿Cómo prepararlo?
El último trimestre es un momento clave en las finanzas de una empresa. Es momento de poner en marcha diferentes estrategias para lograr cumplir con los objetivos marcados al inicio del año. Si hace unos meses, aproximadamente a mitad año, se debería haber realizado una revisión del estado de la compañía, ahora es momento de pasar a la acción. ¿Cómo preparar el último trimestre del año?
Último trimestre del año, ¿Cómo prepararlo?
Lo primero que se debe ejecutar es una revaluación de la situación. Coger los datos de ese análisis a mitad de año y añadir lo sucedido durante el verano.
Una vez se tiene esa fotografía en la que se ha actualizado tanto los ingresos como los gastos, se puede pensar en algunos de los imprevistos que pueden llegar. Es momento de realizar una comparativa con el presupuesto realizado al inicio del año. Esto dará una visión de la empresa, de sí se están cumpliendo objetivos mes a mes o, por el contrario, alguna de las patas falla. Incluso, se puede ver de qué forma reducir los gastos variables de la compañía.
En cuanto a los ingresos, se debe observar cuál es el canal de entrada por el que llegan mayor número de ingresos y si es posible aumentarlo en este último trimestre del año. De esta forma, se puede destinar más recursos a su explotación con el objetivo de incrementar las entradas de capital.
¿Cómo aumentar las ventas en el último trimestre del año?
El objetivo no es solo cumplir con ese presupuesto inicial, incluso tener mayores ingresos, sino que el hecho de superar a la competencia también está incluido. Para lograr aumentar las ventas, sea cual sea tu sector, lo principal es tener una buena estrategia de venta. Además, se puede valorar inyectar capital de trabajo con el propósito de aumentar las ventas.
Sin embargo, una de las piezas clave para superar a la competencia es, sin duda, conocerla. El empresario debe conocer los movimientos que el resto de compañías del sector están haciendo e, incluso, intuir cuáles van a realizar.
Otro de los movimientos que debemos llevar a cabo es ver si se puede agrandar el catálogo de productos complementarios a la marca. De esta forma se pueden encontrar nuevos clientes y aumentar la facturación. Además, si de los clientes se habla, lo lógico es fidelizarlos. Aquel que ya ha comprado tu producto, te conoce y sabe de tus bondades, fidelizarlos e, incluso, convertirlo en prescriptor es un plus que te ayudará a crecer.
La comunicación y el marketing se convierten en fundamentales en estos momentos de globalidad. Buscar la diferenciación, llegar al consumidor/cliente, lograr que adquieran tu producto y repitan, pasa casi ineludiblemente por el mensaje y la forma de comunicar que se tiene. Las redes sociales e internet han abierto un gran abanico para tanto conocer a tu consumidor como comunicarte con él de forma fluida.
Una mejor organización también es clave
Si tener la fotografía actual de la compañía es vital para tomar decisiones, ver el estado de la organización empresarial también es importante. Ver las diferentes formas de trabajar de los departamentos, cómo se comunican entre ellos puede dar, además de una visión del funcionamiento de la misma, las claves para optimizar las estructuras de trabajo, llegando a ser más eficaces y eficientes.
Otros consejos que se deben tener en cuenta es seguir detectando las debilidades y las posibles amenazas de la compañía e intentar minimizarlas. Para ello, disponer del DAFO de la empresa puede ayudar a verlas con claridad y buscar las posibles formas de convertirlas en fortalezas y oportunidades. Sobre todo en un momento de incertidumbre como el que se vive actualmente.